sábado, 1 de febrero de 2014

CRESTOMATIA 454

CRESTOMATIA 454

Busslieder   de  Juliane  P.   v.  Schultt

Todos los hombres y en todos los tiempos al llegar a este mundo se preguntan sobre  la evolución del mundo, sobre el hombre en este kosmos y sobre el sentido de las programaciones y los esfuerzos de los hombres y sobre el destino último de las cosas y de la humanidad y esto nunca es aburritivo, al contrario, es un poderoso ingrediente en la vida de los hombres, los únicos que no pueden dejar de preguntar...La Iglesia, por ser fundada por Dios, tiene mucho que aportar a este mundo y no puede ocultarlo..La  Iglesia  ayuda  a  dar  respuesta  a  los hombres.. a  sus  enigmas   y preguntas....La Iglesia por querer de Dios entra a jugar en la historia de la humanidad porque es el hombre entero - cuerpo y alma - al que hay que ayudar y a quién Dios solo quiere salvar...Jugar limpio es respetar la altísima dignidad del hombre como Dios la ve y mantener este referente...La Iglesia no tiene ninguna otra ambición terrena...  ningún otro  poder  solo  la   "  Salus animarum    "     Santidad  y  salvación de las almas  ¡ Enhorabuena ! Porque mientras lees esta Crestomatia hueles y respiras el buén olor de la doctrina cristiana recogida y regalada en todos los Documentos del Concilio Vaticano II... No busqueis en la realidad Iglesia mas que una cosa: continuar, bajo la guia de Dios Espíritu Santo, la obra misma de Cristo quién vino al mundo para dar testimonio de la verdad, para salvar y para servir...Toda esta cocedura, metamorfosis y efervescencia actual que padece la sociedad humana tiene que sufrirla el hombre para que  actúe  el fermento y se mezcle con la masa para que el hombre se salve... Todos los tiempos padecen obviamente las consecuencias de su crecimiento, transformación, desarrollo y progreso por tanto no sirven las disculpas, es la mismísima vida. Se caracteriza nuestro tiempo por el ruido y el vapor de los cambios profundos en todos los campos pero lo que no cambia es el hombre ni Dios y las exigencias de la única respuesta del hombre en todas las coceduras y globalizaciones de los siglos: llamada universal de Dios a la santidad, el único resultado y la única repuesta adecuada que tiene que cocinar el hombre en el oleaje de los siglos...Cambian los escenarios pero siguen los mismos actores Dios y los hombres...Ningún progreso le va facilitar la respuesta a la santidad porque ya se ha agotado todo el mejor progreso: la victoria de la cruz de Cristo...Pasan los siglos   Dios sigue siendo   Dios   y el  hombre  sigue siendo hombre....


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