CRESTOMATIA
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Aleluia de G. A. Hándel ( Ein Teil )
Año
de la misericordia...La Iglesia como un hospital de campaña
siempre ha ofrecido su misericordia pero ahora en este Año de
la Misericordia nos ofrece una medicina para paliar el grave
problema que atañe a toda la Iglesia de nuestro tiempo: el
fracaso matrimonial, divorcios, situaciones irregulares...Es
necesario que todos los cristianos leamos la Exhortación
Apostólica “ Amoris Laetitia “ del Papa
Francisco...Dice cosas muy bonitas e importantes a luz y
en el contexto del Año Jubilar de la misericordia...Dice que la
tarea de la Iglesia no es ser una aduana sino un hospital de
campaña ante la fragilidad de sus hijos. De otra manera la
Iglesia entiende que toda ruptura del vínculo matrimonial va
contra la voluntad de Dios pero es consciente de la fragilidad
de muchos de su hijos, fracasos matrimoniales, familias “
Patchwork “ deshechas o hechas de retales que no pueden
ser despreciadas ni cxcomulgadas...La Iglesia debe admitir,
acompañar, discernir e integrar la fragilidad con atención y
cuidado, animando y siguiendo cada paso que pueden agradar
mucho a Dios por el amor herido y extraviado, como una luz o
antorcha o faro de puerto para quienes han perdido el rumbo
o se encuentran en medio de la tormenta y de la tempestad...La
Iglesia tiene que apreciar y valorar los elementos positivos y
constructivos del amor en aquellas situaciones que todavía no
o ya no correspondesn al ideal de su enseñanza sobre el
matrimonio...La lógica de la misericordia pastoral nos enseña
a salir y acompañar – sin disminuir el valor del ideal
evangélico - con toda la ternura posible, con la
misericordia y la paciencia las etapas posibles de las personas
que se van construyendo dia a dia...no renuncia al bién posible,
aúnque corra el riesgo de mancharse con el barro del camino...
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