SPRICH -WORTEN - 102
Una vez que subes al tren de las SPRICH - WORTEN ya se agolpan y piden paso para subir otras muchas como esta otra conocida " SI VIS PACEM, PARA BELUM " " SI QUIERES Y DESEAS LA PAZ TIENES QUE ESTAR DE GUARDIA Y VIGILANTE ".... A veces cuando recibimos el saludo de la paz " La paz esté con vosotros " rebota y no se está dispuesto porque hay una repulsa. No hay paz fuera de Dios. El alejamiento de Dios o pecado es la causa de todos los males y de todas las guerras. Para poder recibir la verdadera paz interior de nuestra alma y corazón se necesita una profunda, intima y estable amistad con Dios - vivir en gracia de Dios - nueva familiaridad y lazos con Dios por encima y superiores a los lazos de carne y sangre. La paz que nosotros disfrutamos lejos de Dios es una falsa paz, es comodidad, es pasotismo, está lejos de esa paz que Dios nos regala y nos ofrece, está lejos de esa lucha contra el pecado - dice el Señor, no vengo a traer esa falsa paz sino guerra - la madre contra la hija, la hija contra la madre, la nuera contra la suegra - son fuerzas contrarias, en unos prende el fuego, reciben y viven la paz que Dios desea y quiere que esté ya ardiendo, otros no se deciden, incluso dentro de la misma familia, no se puede estar en paz y calma con los mundanos y con Dios al mismo tiempo, es necesaria una decisión, atención, vigilancia, una política y estrategia distinta, milicia, guerra contra uno mismo para recibir y conservar la verdadera paz que Dios nos trae por medio de su gracia......Hoy se grita y proclama por todas partes " Pax - pax " " Paz - paz " y la paz no está porque no está Dios. Solo Dios es el " Gran Irenarca " dueño y principe de la paz...La paz, obviamente, no es la simple ausencia de guerra. La verdadera paz es un don de Dios, es un fruto del Espiritu Santo, y si no se tiene una vida ascética - lucha cristiana - cuidado - Para Bellum " - no bajar la guardia, hacer guerra - violencia para salir de esa calma chicha o falsa paz, para evitar la tentación, el pecado, cuidar las virtudes humanas y crecer en las virtudes teologales: fe, esperanza y amor. " Nadie da lo que no tiene " Si no tenemos paz, no podemos " cacarear " ni firmar ni sembrar ni regalar paz a nadie. La Paz de Dios - esa paz interior, gracia y amistad con Dios y de conciencia, esa tranquilidad o ataraxia tan deseada que busca y abandera el hombre solo se conquista con el esfuerzo, programación y lucha contra uno mismo. A la astucia del león rugiente y a los enemigos de la Paz de Dios solo se vencen con la estrategia y con la guerra así nos lo advierte la Biblia " Militia est vita hominis super terram " " Es combate la vida del hombre en la tierra " , pero no una guerra o combate contra nadie sino contra uno mismo....para recibir la paz, vivir en paz y sembrar la paz.
asz interior
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