Coro de " Il Crociato " de Meyerbeer
CRESTOMATIA 484
Leyendo una vez más la pequeña carta del “ Apóstol San
Judas, siervo de Jesucristo y hermano de Santiago el Menor,
Obispo de Jerusalén “ me pareció tan moderna y actual
que me sirve para elaborar una nueva Crestomatia en este
tiempo de Cuaresma...Escribe San Judas esta minúscula carta a
los cristianos sobre el año 70 y ofrece una estampa y foto
perfecta de los cristianos de hoy...Les habla así: “ A
vosotros los fieles cristianos - los que habeis recibido la
llamada divina - os exhorto a combatir y resistir firmes en
vuestra fe y llamada en medio de los hombres malvados y
dominados por sus pasiones - impureza y avaricia - y que
viven en una falsa libertad que es esclavitud...la esclavitud
más faraónica del pecado...Dios salvó a su pueblo de la
esclavitud de los Egipcios y ahora nos salva a nosotros del
único mal del pecado.... Dios salvó a su pueblo y
preparó el castigo para los falsos maestros, para los
impios, para los ángeles que perdieron su dignidad y para las
ciudades de Sodoma y Gomorra entregadas a la
fornicación y al uso antinatural del cuerpo...pueblos de
corrupción y conducta inmoral y escandalosa...Sigue exhortando
a su fieles: “ Vendrán tiempos en que los hombres
se burlen de todo y vivan según sus impíos deseos que son
los crean divisiones...vosotros permaneced en el camino de la
salvación...tratad con compasión a los que vacilan y
procurad salvarlos, arrancándolos del pecado y del castigo
eterno..Evangelizarlos...No sobra ni una coma para plastificar y fotografiar la moderna sociedad de hoy.... Cuaresma es dejar el camino de la
perdición y ponerse en el camino de la salvación...No hace
falta tener mucho olfato para descubrir que el mundo de hoy
vive lejos de la salvación y de la amistad con Cristo
Salvador.. incluso los cristianos...hay mucha mies y campo para trabajar....Por eso reza la Iglesia durante la Cuaresma con
oraciones duras y radicales “ Cor mundum crea in me Deus
et Spiritum firmum innova in visceribus meis “ Dios crea
en mi un corazón limpio - destruye mi corazón viejo - y
revuelve mis entrañas - por dentro y por fuera y dame un
espíritu firme para cambiar mi vida y empezar de
nuevo...bién para mi y bién para los demás...Termina la minúscula carta diciendo: “ Los hombres sin Cristo son como nubes sin agua,
árboles de otoño sin fruto, dos veces muertos y arrancados de
raiz, son como olas bravías que echan espuma, son astros
errantes y sin luz...
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