SPRICH - WORTEN - 151
No estaba tranquilo si no dedicaba durante el mes de Octubre una " SPRICH - WORTEN " al rezo del " ROSENKRANZ " " CORONA DE ROSAS " o " SANTO ROSARIO "....Es la oración preferida de la Santísima Virgen María. Ningún cristiano debería pasar por este mundo sin rezar diariamente esta " corona de rosas " tesoro garante de alegría, felicidad y salvación eterna. Además de entrar en el coro " PANAGIA " de alabanzas y rosas por todas las generaciones y con los angeles y los santos a la mas Santa - Santisima Virgen María - , recordando el piropo de las letanias " CAUSA NOSTRAE LAETIAE " " RAZÓN Y CAUSA DE NUESTRA FELICIDAD TEMPORAL Y ETERNA " . Cristianos desde nuestra bajeza, necesidad y debilidad el camino y senda mas corta para llegar a Dios es María. Por eso el Concilio Vaticano II nos anima a venerar y enaltecer a Santa María, madre de Dios y madre nuestra, como una excelente forma de alabar y honrar al Hijo de Dios, con tantas devociones, jaculatorias y el rezo del Santo Rosario y unir siempre a María con Jesús. Siempre Jesús escucha las plegarias y elogios que le dirigen a su Madre. Con María vamos bién seguros, dice el Concilio, porque María ha entrado intimamente en la Historia de la salvación. El rezo del Santo Rosario es fuente de vida cristiana. Pasar la corona de rosas a diario, repetir con fe y amor las oraciones fundamentales del cristiano - Padrenuestro, Ave María y el Gloria - y meditar los misterios centrales de nuestra fe: gozosos, dolorosos, luminosos y gloriosos nos ayudará a tener viva y vibrante nuestra condición cristiana. Con el Rosario también nos unimos al desfile y al clamor " Magnificat " de todos los siglos por honrar a María que nunca cesará. Sentiremos el gozo y la alegría de estar en la caravana de Fatima y de Lourdes para escuchar de la boca de María " Rezar el Rosario " y con ella vamos bién seguros. El Rosario es un coloquio confidencial con María - una persona viva -, una conversación llena de confianza y abandono. Presentamos nuestras rosas marchitas de nuestra vida, gozos, dolores, luces y glorias para alcanzar de María las gracias y bendiciones necesarias para nuestra salvación. Rosario es estar en el regazo de nuestra Madre - Santa María - para sentir el calor y las ganas de Dios y del Cielo.
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