SPRICH - WORTEN - 168
Pretendo sumarme a las felicitaciones de los que celebran la Solemnidad de la Inmaculada Concepción en el centro del Adviento para hacer alguna manera - mi granito - de novena. Maria es la realidad viviente o personificación del Adviento que nos enseña y ayuda a magullar - pisar - el pecado y llenarnos de la gracia de Dios. Inmaculada - toda limpia - purisima - tota pulchra - toda hermosa - concebida sin pecado original y sin pecados personales. Asi aparece como la única en toda la creaciónb en el libro del Genesis " IPSA CONTERET CAPUT TUUM " " ELLA HERIRÁ TU CABEZA, PISANDO EL MUNDO Y LA CABEZA DEL DIABLO " . María es el modelo y ejemplo de nuestro combate contra el pecado, el mundo y el diablo. Esencia de la vida cristiana: vaciarnos del pecado y llenarnos de la gracia de Dios. María - llena de gracia - la Panagia - Santisima - las Tres Personas de la Trinidad - se rivalizaban en generosidad para adornarla y llenarla de gracia. María, hija predilecta de Dios Padre, Madre de Dios, hijo y Esposa de Dios Espiritu Santo, mas que Ella solo Dios. Dicen los teólogos " Servatis servandis " salvadas las distancias ¿ Qué obra de arte hará Dios con cada uno de nosotros - hijos de María y files cristianos - si luchamos por imitar a María Inmaculada - Madre de Dios y Madre nuestra - : luchar contra el pecado y cuidar la gracia de Dios en nuestra alma. No hay hecatombe mas grande - naufragio, pérdida o desgracia que un alma en pecado - . Tratar y acercarse a Maria -Inmaculada nos descubre nuestra negrura, pobreza o estado del alma en pecado o sin gracia de Dios. Así lo entiende la sabiduría popular al usar el calificativo de " Desgraciado " el hombre sin gracia y sin Dios. Esta estampa o imagen de la Inmaculada pisando la cabeza del dragón-enemigo es el simbolo " pirrico " mas perfecto de la vida y ascetica cristiana. " Pirrico " de " pir-piros " que es fuego, sangre, rojo. Lucha a sangre y al rojo vivo del fuego contra el único mal que nos hace daño: el pecado. No hay otra manera de celebrar el Adviento ni la Navidad, todo lo demás vendrá en sobreabundancia de bién y plenitud con la gracia de Dios.
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