Andante de L. V. Beethoven
Tiempo de
Pascua...En este mundo hay mucho ruido y poco silencio...El
silencio es necesario para hablar con Dios...El primer
lenguaje de Dios es el silencio...No se puede disfrutar de la
Pascua sino es en la contemplación, en el recogimiento, en el
espíritu, en la meditación y en la oración, es decir,
centrarse, pensar y tratar a Cristo vivo y Resucitado...Dice
el Cardenal Robert Sarah en su libro “ La fuerza del
silencio “ ….El silencio favorece nuestras relaciones
vitales y contínuas con Dios, facilita la oración y la contemplación y despierta
en nuestro corazón buenos pensamientos y deseos...San Bernardo añade
el silencio permite al alma pensar mejor en Dios y en las
realidades de nuestra fe y del Cielo... Es normal que todos
los santos han amado el silencio...Es dificil encontrar una
persona piadosa que haga mucho ruido o que hable
mucho...Es bueno saber que nos pedirán cuenta de toda palabra ociosa o sobrante....El silencio nos proporciona fuerza, energía y una
visión nueva de todas las cosas como la luz de la
Pascua..También es bueno para la salud.....Sin silencio es imposible disfrutar de la
Resurrección y gozar de este dia gloriosísimo de la
Pascua...Dice San Doroteo : “ Cuidate de la palabrería
porque ahuyenta los pensamientos piadosos y la meditación en
Dios, como cuando abrimos la puerta de un horno, el calor se
escapa...Nos enseña el libro de los Proverbios “ En el mucho
hablar no faltan culpas, pero el que modera sus labios es
inteligente...” No sabemos escuchar... Dice Santa María
Magdalena de Pazzi que quién no ama el silencio es incapaz de
apreciar las cosas de Dios - Vida sobrenatural, gracia,
oración, sacramentos - ...La Biblia nos enseña que hay tiempo
de hablar y tiempo de callar...San Efrén nos da un sabio y
sano consejo para nuestras - logomaquias - verborreas y palabraría : “ Habla mucho con Dios y poco con los hombres
“ ...
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