SPRICH - WORTEN - 146
Hoy me atrevo a poner un pobre grano en el pentagrama de la partitura de la vida humana sobre la " dilogia " o misterio " del amor y del dolor " rios de tinta en la historia para intentar definir y dilimitar estos grandes misterios o realidad del dolor. sufrimiento, amor .Para hablar de este emparejamiento " dolor = amor " me viene a la mente este nuevo SPRICH - WORTEN que reza así " KEINE ROSE OHNE DORNEN " " NO HAY ROSA SIN ESPINAS " " NO HAY AMOR SIN DOLOR " . Es un misterio, cuanto mas amor y mas dolor mas se ennoblece y enriquece el hombre y mas se parece a Dios. Había un hombre lleno de amor a Dios y de virtud probada - figura de Jesús de Nazareth - en la ciudad Hus en la Idumea - sur de Israel - llamado Job, cuanto mas arreciaban los sufrimientos mas amaba a Dios - el amor a Dios era el contrapeso - ante los males que le anunciaban de su familia y de sus ulceras y llagas en todo cuerpo. Quiso con dolor y amor estar en lo mas alto y mas cerca de Dios y de la realidad humana " Dios me lo dió. Dios me lo quitó, Dios sabe mas, bendito sea Dios " " Si somos capaces de recibir de Dios todos los bienes inmerecidos ¿ Por qué no también los males ? ". Queramos o no con Cristo entra en juego una nueva lectura del dolor y del amor, ya podemos gastar mas tinta y hablar de una " trilogia " : Dolor, amor, Cristo, Nadie tiene mas dolor ni mas amor que Cristo para hacer la Redencion del mundo, el mayor y mejor bién de la humanidad. Sin sufrimiento, sin dolor, sin cruz y sin amor - nihil - nunca se hubiera podido hacer la salvación del mundo. Invento divino: Cruz = Cielo. El sufrimiento y amor de Job fueron los quilates que hicieron la figura histórica del gran hombre Job y el sufrimiento y amor de Cristo fueron el precio de nuestra salvación y riqueza. Esta es la gran revolución cristiana: convertir, el dolor en sufrimiento fecundo, hacer de un mal, un bién y con esa " trilogia " amor, dolor, Cristo conquistar la eternidad. Nunca pasa el dolor a nuestro lado dejándonos como antes. Purifica, eleva, aumenta, configura como la lava una nueva foto o panorama, nos une más a Dios, nos hace corredentores con Cristo. Cuando llegan las pruebas y tribulaciones nos fijaremos menos en la escena teatral y daremos paso al amor. No hay amor sin dolor, pero el amor ayuda y empuja al dolor. Manoliño, era un niño pequeño de 5 años, llevaba sobres sus espaldas a un hermano mayor y muy pesado, le decía la gente ¿ Manoliño, no te pesa ? No, responde, porque es mi hermano. En el Calvario habia mas amor que dolor y que peso. También estaba el amor y el dolor de Santa María, maestra del sacrificio y maestra del amor..Es dificil cerrar la historia " del dolor y del amor " en el mundo sin contar con los ingredientes de la pagína del Calvario.
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