SPRICH  -  WORTEN   -267

Si el pecado  es el  único mal  de este mundo   que nos hace daño   tenemos  una sola  estrategia:   luchar  y huir del pecado. A esta  guerra  la califican  de  " Ascetica  cristiana  "    del  verbo  griego  " Askeo "   que es  luchar, combatir, pelear. El pecado  es una ofensa al amor  de  Dios, hiere la naturaleza del hombre  y atenta contra la solidaridad  humana. San Agustín  lo define así:  "  es una palabra, un acto  o deseo  contrarios a la ley eterna ". Los  santos  no temen  mas que al  pecado. Se cuenta   que    Arcadio, emperador de Constantinopla,   instigado   por su esposa  Eudoxia, quiso castigar  a  San Juan Crisóstomo . Cinco  jueces  propusieron  diversos castigos:  Mandadlo  al destierro, dijo  uno; Quitadle los bienes, añadió  otro; Metedlo en la carcel  cargado  de cadenas: Quitadle la vida;  el  último,   por fin,  dijo al emperador:  Si lo mandais al destierro estará contento, sabiendo que en todas partes tiene a Dios;  si  lo   despojais   de sus bienes, no se los  quitais a  él sino a los pobres; si lo encerrais  en un calabozo, besará las cadenas;  si lo condenais a muerte, le abrís la puerta del Cielo......Hacedle pecar,  pués no teme mas que el pecado ..." El  pecado es el peor mal. Nacemos  en  pecado  original,  privados de la gracia,   proclives  -  inclinados - al pecado    por la concupiscencia. La  voluntad está debilitada, el diablo nos tienta  desde dentro y desde fuera  con sus  ofertas, engaños y tentaciones.  Solo  con la gracia de Dios  podemos vencer   las tentaciones  -  no hay  otra contramedida  -  . Jesucristo  mismo quiso  ser tentado por el   demonio,  pero lo rechazó  "  Apártate  Satanás " .   Repetía  aquella  niña  santa  "  Apártate  y  vete  satanete " .  Hay diversidad  de pecados   de pensamiento,  de deseo   (interno) ,  de palabra y  obra ( externo ),  de omisión,  pecado  mortal y  pecado venial. El consentimiento  ya genera  pecado. Para que sea grave   hace falta:  que la cosa en sí sea  mala -  contra un precepto  o  mandamiento -  o que se crea  que es  mala;  saber, que sí se  consiente   contra la voluntad de Dios; consentir en aquel mal  - haciendo u omitiendo   lo que se debe hacer -.  El  pecado también se vuelve contra el hombre, pierde  la vida de la gracia, deja de ser hijo de Dios  y se hace reo del infierno. El pecado  venial  se comete cuando la materia es leve  o siendo grave la materia  no se da plena advertencia o consentimiento. No  rompe  la amistad  y alianza con Dios, pero la debilita, y origina  un afecto desordenado a los   bienes creados, impide  el progreso  del alma en el ejercicio de las virtudes y en la  practica del bién moral,  nos hace tibios   y merece  penas temporales   de purificación. El pecado  prolifera   en nosotros   pués uno   nos   lleva  al otro. El  Rey  David   del adulterio  pasó  al homicidio. Dios  aguarda  pacientemente  para perdonarnos siempre  en el sacramento de la  Penitencia  porque  no quiere  que nadie perezca.  Un juicio  donde el reo siempre  sale absuelto.   Los vicios son como   contrarios a las virtudes, son habitos perversos  que obscurecen  la conciencia  e inclinan  al mal. Los vicios  pueden  agruparse en torno  a los  siete pecados   capitales  o cabezas  de serie:  soberbia,  avaricia,   lujuria, ira, gula, envidia  y pereza. Tenemos responsabilidad  en los pecados  cometidos por otros  cuando cooperamos  culpablemente  a que se cometan. Además  de los pecados  personales   existen estructuras  de pecados  que son situaciones  o instituciones  contrarias  a la ley  de Dios,  expresión y efecto  de los pecados personales. Dice  San Pablo   que todavía  queda  margen  para nuestras  quejas, dolores    y sufrimientos  porque  " aún  no llegamos a la sangre  en la lucha contra el pecado  ".  Dice  el Señor  "  Si tu ojo,  si tu mano,   si tu  pié  te  hace pecar.....tira todo fuera,    pero   normalmente  no hace falta  tanto,   pues   queda mucha cancha   antes.....oración,  mortificación,  penitencia,  trabajo,  devoción  a la  Santísima Virgen  María  y  la   poderosa  ayuda  del Angel de la guarda.