SPRICH -  WORTEN  - 529

                                                          " CORPUS PAULINUM "  Nº.- 15

                          "EPISTOLE  PROS ROMAIOUS  - CARTA A LOS ROMANOS " 

                              " CONCLUSIÓN "  "  RECOMENDACIONES Y  SALUDOS " 

El  amplio  y afectuoso   saludo   de despedida    de  la carta  es un  monumento literario  historico  que da  pistas   para la   exégesis, estudio y   interpretación   del    gran número    de cristiano  que formaban   una gran familia   hermandada   con los vínculos  de la fe  que se llamaban  entre si   " Hermanos "  " Santos ".  Antes, ahora  y   siempre  están los cristianos   convencidos   de ser levadura   que acaba transformando   aquella  masa   informe  del mundo romano   y  penetrar  en todas las realidades   y corazones    como  una inyección intravenosa  que  rejuvenece  y   renueva   con un  espíritu   nuevo  toda  la masa. Ante  esta  novedosa   presencia  Evangélica  proclamaba  Tertuliano :  "  Ya  llenamos el mundo y todas vuestras casas ". Familias  animados    de un espíritu nuevo  que vivieron   de Cristo  y dieron a conocer  a Cristo   desde  entonces  y  desde  el "  Finis terrae "   en   Hispania  y     que  fueron como centros   de irradiación  o faros  del  mensaje evangélico  que  iluminaron  tantos y tantos hogares cristianos. Pero   escuchemos   con agradecimiento  la  última   lección  despedida   de Pablo  a los romanos:   O recomiendo  a Febe, nuestra  hermana, que está  al servicio   de la Iglesia  de  " Kejries " -  Céncreas -  Corinto - , para que  la recibáis  en el Señor  de manera  digna  de los santos  y le ayudéis  en lo que   pueda necesitar de vosotros:  porque también ella asistió  a muchos  y, en particular, a mí. Saludad  a Prisca  y  Aquila, mis colaboradores  en Cristo Jesús, que  expusieron sus cabezas  para salvar  mi vida,  a quienes  damos gracias  no sólo  yo  sino también todas las  iglesias    de los gentiles y saludad  a la iglesia    de se reúne  en su casa. Saludad  a Epéneto, amadísimo  mío,  primicia  de Asia  para Cristo. Saludad  a María, que  se ha esforzado  mucho  por vosotros, Saludad  a Andrónico   y Julia, mis parientes  y compañeros   de cautividad, que gozan  de gran consideración   entre los apóstoles   y que llegaron  a ser cristianos antes que yo´. Saludad  a Ampliato, amadísimo  mio  en el Señor. Saludad  a Urbano, nuestro colaborador  en Cristo  y a mi amadísimo Estaquis. Saludad  a Apeles, de fe  probada en Cristo. Saludad  a los de  la casa   de Aristóbulo. Saludad  a Herodión, mi pariente. Saludad  a los de la casa  de Narciso  que creen  en el Señor. Saludad  a Trifena  y a Trifosa, que   trabajan  en el Señor. Saludad  a  la amadísima  Pérside, que trabajó  en el Señor. Saludad a Rufo, escogido  en el Señor,  y a su madre, que es también mía. Saludad  a Asíncrito,  Flegonta, Hermes, Patrobas, Hermas  y a los hermanos  que están  con ellos. Saludad  a Filólogo  y a Julia, a Nereo  y a su  hermana, y a Olimpas  y a todos  los santos  que están con ellos. Saludaos  unos a otros con el beso  santo. Os saludan todas  las iglesias   de Cristo. Os ruego,  hermanos,  que tengáis  cuidado  con los que producen  discordias  y escándalos  contra la doctrina  que aprendísteis. Alejaos  de ellos,  pues ésos  no sirven a Cristo, nuestro Señor, sino  a su propio vientre, y  mediante  palabras  dulces  y aduladoras  seducen  los corazones   de los ingénuos. Vuestra  obediencia  ha llegado  al conocimiento  de todos;  por eso me alegro por vosotros, pero quisiera  que fuérais  sabios  para el bién  y sencillos , en cambio.  para el mal. El Dios    de la paz  aplastará   rápidamente a Satanás  bajo  vuestros piés. La gracia  de nuestro Señor Jesucristo  esté con vosotros. Os saluda Timoteo, mi colaborador  y Lucio  y Jasón  y Sosípatro, mis parientes. Os saludo  yo, Tercio,  que he escrito  esta carta  en el Señor. Os saluda Gayo, que nos  hospeda  a mí a  y a toda la iglesia. Os saluda  Erasto, el tesorero   de la ciudad  y cuarto, nuestro  hermano, Al que tiene el poder  de confirmaros  según mi  evangelio  y la  predicación  de Jesucristo, según  la revelación   del misterio  oculto  por los siglos  eternos, pero ahora manifestado a través   de las Escrituras  proféticas conforme al designio  del Dios eterno, dado  a conocer a todas las gentes  para la obediencia  de la fe, a Dios, el único sabio, a El  la gloria  por medio  de Jesucristo  por los siglos de los siglos. Amen.  Nota  bene:  Esta es nuestra  fe  que nos gloriamos  de profesar y vivir   en el nombre  de nuestro  Señor Jesucristo que vive y reina  por los siglos de los siglos. Dentro  de los designios   amorosos  del  Dios  infinitamente  Sabio y  Todopoderoso no  hay  categoria  ni regalo  mayor  entre los hombres  que  la fe cristiana. Analítica espiritual:  La  doctrina  que  hemos escuchado   una vez más   de la boca de   San Pablo   ¿ Chirría  y desafina  o suena  dulce  y  afinado ? .