SPRICH  - WORTEN   - 276

Que bién apuntala  y defiende la vida  el quinto mandamiento  de la ley de Dios  en  oposición  a la  hodierna  cultura    de la muerte:  muerte  de hambre,  muerte  por  violencia,  homicidios, abortos y guerras. Que  señal divina  mas certera  "  No  matarás "    pero  también  prohibe las riñas, golpes, envidias  y sobre todo  manda  el respeto  y cuidado  exquisito  de la vida humana  que es un don de Dios. Solo Dios  es dueño y Señor  de la vida. La  vida humana es sagrada  desde  el origen  hasta  el final  de su existencia. El hombre no es más  que un simple  administrador  y usufructuario  de  la vida,  debe cuidar su propia vida y la  vida   de los demás. A nadie  le es lícito   destruir  o cooperar  directamente  a un ser humano  inocente, porque es gravemente contrario  a la dignidad de la persona  y a la santidad  del Creador  "  No quites la vida del inocente y  del justo " . ¿ Deberes del quinto mandamiento   con uno mismo ? . Amor y respeto a si mismo  sin egoismos ni soberbias. Usar bién de los talentos  y capacidades   tanto naturales como sobrenaturales. La pereza   se opone a que los talentos fructifiquen. Amor y respeto del cuerpo, no  culto  al   cuerpo  "  body "  cuidarlo, respetarlo y santificarlo. Se oponen a este   deber:  el suicidio, la mutilación,  la eutanasia,  la gula, la embriaguez y las drogas. El cuidado  de la  vida espiritual,   sí cuidar  el cuerpo  y cuidar   la vida de la gracia   en nuestra  alma  -  conocer  la doctrina cristiana  y cumplirla,  confesar y comulgar  con frecuencia, tratar  a Jesús en el Sagrario   etc.  -  . La  vida de la gracia se mata  con el pecado   mortal  que es como un suicidio. Por el Sacramento  de la  Penitencia  se recupera  la vida sobrenatural. ¿ Deberes del quinto mandamiento con los demás ? . Respeto  a la vida  propia y a  la ajena, este  derecho  es   conculcado  en el homicidio,   en el aborto  y en la eutanasia , crímenes horrendos contra Dios  y contra el hombre. La  vida animal  y la vida vegetal   hay  que  respetarla y cuidarla   -  Dios  es siempre autor de la vida -  no maltratarla  ni martirizarla. Respeto a la convivencia  -  no basta  con  no matar  -   sino  que  prohibe el odio, envidia,  enemistad,  discordias,  riñas,  venganzas,  peleas, acosos, desear mal a  alguién,  alegrarnos del mal de los demás,  insultar, calumniar, murmurar, hacer la guerra,   etc....  y  manda  perdonar  hasta  "  setenta veces siete  "   es decir, siempre. El pecado de escándalo, toda palabra, obra y omision  que incita   o provoca a otros  a pecar  - atentar  contra el bién  espiritual  y superior -  del prójimo:  conversaciones perversas, blasfemar,   enseñar fotos  o libros  inconvenientes  y  provocativos, vestidos indecorosos, no ir a Misa...." Al  que comete  el escándalo,   más  le valiera   que atándole una rueda  de molino  al cuello, le arrojasen al fondo del mar  " .  Las  obras de  misericordia  nos  esqueman  y recuerdan    como ayudar  -  en sentido positivo -  al prójimo   en sus necesidades tanto  materiales  como espirituales. No hace falta  "  una mente iluminada  "    sino  " la sensatez mas  básica "    para  ver  positivamente  la vida   y   defender  la cultura  de la vida    frente  a   la cultura  de la  muerte   que  solo tiene explicación  en el  mundo   por el alejamiento  del  Dios   y  Señor  de la vida   y  el dominio  frenético    de  la  guadaña  de  Satanás,   espíritu del mal y de la muerte.