SPRICH    - WORTEN  - 303

                                                            " LEX  ORANDI  ( XIX) " 

Concluimos  nuestra  " Lex  orandi  "   con la  7ª   y  ùltima petición  "  Sed  libera nos a malo  "    "  Y  libranos del mal  " .  Sacamos  nosotros también nuestra conclusión   y lección  "   Sin  la  ayuda   de la oración,  estamos convencidos,  que  nosotros  solos  por nuestra parte , no podemos hacer otra cosa que perdernos.  Que  bién  lo apunta  y  enseña  el Santo  Cura de  Ars   "  Si no experimentais   prueba,  asalto   o tentación  alguna, es porque los  demonios son  vuestros amigos, vuestros pastores y vuestros guias  y   al final   de vuestros dias  os arrastrarán  a los abismos  del infierno  ".  Esta  última  petición   simpatiza y está  acorde  con el pensamiento  de Jesús  " Padre, no te pido  que  los retires del mundo, sino que los guardes  del Maligno ". Este  mal   que  pedimos  a Dios  que   nos libre,  no es  algo  diluido  y abstracto  sino   designa una persona -  Satanas  -  el Maligno -  que se  opone a Dios  o  Diablo  -  diabolos  -   que      "   se  atraviesa "  " zancadillea    y traba  "  "  se enreda  a nuestros  pies   para tropezar en el camino  "   en     contra del designio de Dios  y su obra   de salvación .Satanas es el seductor del mundo entero,   es desde el principio  mentiroso  y padre de la mentira. La  victoria  sobre  el "  principe  de este mundo "    está   alcanzada  así: "  El  diablo  rugiente  se lanza  en persecución  furiosa   contra  la nueva  Eva-   la Mujer - María   y su  nueva  descendencia,  pero  " echado  abajo  "   y   "  despachado   a  gusto  "   en el  ataque  contra María, se vuelve   rabioso  para hacer la guerra   al resto  de sus hijos. Su  esencia  y    vieja  estrategia  es oponerse frontalmente  a Dios  y a su plan de salvación, por  eso    pedimos  confiados    a Dios  que nos libre de todos los males, principalmente del pecado  y de la muerte eterna. Me viene  a  la memoria   el embolismo    que el  Misal   Romano  coloca  y repite  diariamente  en  cada  Misa  que  suena así "  Libera nos, Domine,  ab omnibus malis..... Líbranos  de todos los males, Señor, y concédenos  la paz en nuestros dias, para que ayudados por tu misericordia,  vivamos siempre libres   de pecado  y protegidos  de toda  perturbación, mientras esperamos  la gloriosa venida  de Nuestro Señor  Jesucristo "  . Y termina  con la doxologia  final  "  Porque tuyo es el Reino, el poder  y la gloria   por siempre, Señor. "  contra   la pretensión del Diablo.  Terminada la    "  oración dominical   "   o  "  Pater noster  "    decimos  " Amen "  queriendo significar   "  Así  lo acepto y pido al Señor y así lo  espero  de su  divina misericordia." Amén  "  significa   "  fiat  "    "  hágase  "     "  así  es  "   "  así    sea "    el deseo  de que se  realice  lo que mas  quiere Dios  y   lo que mas    necesitan los hombres.