SPRICH   - WORTEN   -  476

                                                         " CORPUS PAULINUM  "   Nº.-  3

                                          "  EPISTOLE   FILIPENSIOUS   - A LOS FILIPENSES  " 

               "  PROYECTOS  Y  NOTICIAS  " " ENVIO   DE  TIMOTEO  Y EPAFRODITO   "  

La prisión    de Pablo  encendio  el amor  y la generosidad  de los  Filipense, que enviaron   a Epafrodito   para   que le atendiera   en cuanto necesitara.  Comenta San Juán Pablo   II  : "  El sufrimiento  está presente   en el mundo    para provocar   amor,   para hacer nacer  obras  de amor al prójimo, para transformar  la civilización   humana  en la  " civilización   del amor " .   Timoteo  había colaborado  con San Pablo   en la predicación   y conversión   de los filipenses, acompañándole  en alguno   de sus viajes  apostólicos  o siendo enviado por  Pablo, es decir, aparece  en la labor apostólica   como  el " alter ego "  de Pablo     y cabe destacar   la identificación   de sentimientos  y de afanes  con  el Apóstol, modelo  de comunión  con   los pastores   legítimos   de la Iglesia  y aparece mas tarde  como Obispo   de  Efeso. Tanto  Timoteo,  como  Epafrodito  o   Tiquico   eran   los correos  y animadores    para las noticias, mensajes o cartas     entre  las primeras comunidades  cristianas y  Pablo   sobre todo  cuando    estaba encarcelado. Ahora nos  habla  de   las encomiendas   de    Timoteo  y   de Epafrodito;   Espero  en el Señor Jesús enviaros  pronto a   Timoteo, para que  también    yo cobre ánimo  al tener  noticias  vuestras.  Pués  a nadie  tengo   tan identificado  conmigo  en la preocupación  sincera   por vosotros, ya que  todos  buscan sus propios  intereses, no los  de Jesucristo. conocéis  su probada   virtud, pués  como un hijo  con su padre  ha servido  conmigo al Evangelio. Espero  enviarlo nada más  vislumbre  el desenlace   de mi causa. Además,  confio en el  Señor  que yo mismo  pueda  ir pronto. No obstante,   consideré  necesario  devolveros  a Epafrodito, mi hermano, colaborador  y compañero  en las batallas, enviado  por vosotros para atenderme  en mis necesidades, ya que  os  echa   de menos  a todos  y está  preocupado  porque oísteis  que había  enfermado. En efecto,  enfermó  y estuvo  a punto de morir, pero  Dios  se compadeció  de él  y no solo  de él sino también    de mí,  para que  yo  no tuviera tristeza   sobre  tristeza. Por eso me doy mucha prisa   en enviarlo, para que  al verlo  de nuevo  os alegréis  y yo  esté sin pena. Acogedle, por tanto,  en el Señor  con toda  alegría  y tratadle  con el   honor  debido  a las personas  como él, puesto  que por la obra   de Cristo  estuvo  a las puertas    de la muerte, exponiendo  su  vida  para supliros  a vosotros  en el servicio  que no podíais  prestarme. "  Frater  qui  adjuvatur  a fratre, est  tanquam  civitas firma....."  El hermano  ayudado por su hermano  es tan fuerte como una ciudad amurallada. Como  el naipe,  que solo no se sostiene,  pero  apoyado  en  el  otro hermano  siempre  está  en pié,   porque uno sostiene al otro..