lunes, 21 de octubre de 2019

DOXOKALIA - 130










                                 DOXOKALIA   - 130





EL RINCON DE MANOLO: TO ORGANON : B/ Invención a 3 voces de Bach 1...




OBRAS DE LEON MAGNO

En medio de la controversia “ eutiquiana “ surgió la doctrina ortodoxa cristológica del Padre de la Iglesia mas ilustre de este siglo V el Papa León Magno con su obra “ Tomus ad Flavianum “ . Fué la carta magna, básica y definitiva del Concilio de Calcedonia en el año 451. El “ Tomus ad Flavianum “ empieza con la descripción de la situación y polémica de Eutiques que defendía el monofisismo, una unica naturaleza en Cristo en la unión de la divinidad con la humanidad. Desarrolla luego brillantemente la teología - antidoceta- de la Encarnación real y verdadera especialmente contra Eutiques. Hace una exposición del Credo Apostólico: “ Jristos ek tou Patros gennecen….ek Marias tes parcenou...”. El Hijo procede del Padre….y nace de la Virgen en el tiempo. Esboza la doctrina de las dos naturalezas en Cristo siguiendo a San Agustín “ Ek duo fisesin….” De dos naturalezas sin sonfusión, sin cambio, sin división y sin separación. Hace un juicio de la falsa doctrina de Eutiques. Hace una exposición viva de la pasión y muerte de Jesús para testimoniar la naturaleza humana, significado de la muerte de Jesús para la redención y para la Iglesia. Lo fundamental de la doctrina cristologíca de León Magno es el doble nacimiento de Cristo - doble consustancialidad - de Dios y de los hombres.El mismo Primogenito eterno del Progenitor eterno nació del Espiritu Santo y de María, la Virgen en el tiempo….” Unigenitus sempiternus natus est de Spiritu Sancto….et de María virgine …..” . León Magno conocía perfectamente la doctrina de Agustín cuando habla “ una persona Christi in utraque natura...” . Una sola persona de Cristo en dos naturalezas...ambas intactas, completas e inconfusas…. “ Qui enim verus est Deus, idem verus est homo...” El mismo que es Dios verdadero, es también verdadero hombre. La humanidad de Cristo - humana natura - no cambia la divinidad, ni la divinidad – divina natura - absorbe a la humanidad. Actúa y opera siempre un solo sujeto – Hypostasis o Persona - en Cristo en comunión de ambas naturalezas “ Agit in utraque forma cum alterius communione….” . Podemos decir a causa de esta unidad que el hijo del hombre bajó del Cielo y el Hijo de Dios fué crucificado… “ Legitur Filium Hominis descendisse de Coelo et rursum Filius Dei crucifixus ac sepultus...”. Tras las conclusiones del Concilio de Calcedonia en el año 451 y del Concilio de Constantinopla del año 553 aparece la nueva disputa del monotelismo o una sola voluntad en Cristo que terminará condenado en el Concilio Trullano o de Constantinopla del 681.

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